Y claro que cuesta, y claro que sufres, y claro que te planteas tirar la toalla, pero no cabe duda de que la recompensa merece la pena.
Seguir escalando, poco a poco, día a día, más rápido o más deprisa, no importa, simplemente seguir subiendo, seguir persiguiendo vuestros sueños, seguir luchando, aunque duela, porque cuando estéis en la cima y miréis hacia abajo, no os podréis sentir más orgullosos de vosotros mismos, lo habréis conseguido, lo habréis logrado, habréis vencido.
Charlie
Black Dos.