Hélices

sábado, 29 de octubre de 2016

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Y el amor se evaporó, como el agua no lo hace desde que descubrió el frío.

Charlie Hélice

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Tengo cien pellizcos en el pecho y treinta y dos caricias por la espalda.

Me huele el alma a ti.
Me duele el alma a ti.

Charlie Hélice

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Era más de soplar las noches y yo de encender las velas,
más de luciérnagas ciegas, grillos mudos, robles de piedra.
Magia los Martes, los Viernes de cera.

Charlie Hélice

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He visto maravillas del mundo que me han hecho sentir mentos que mirar tus ojos en la calle de siempre.

Charlie Hélice

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Nunca fuimos nada y llegaste a ser mi todo.

Qué torpe el destino y qué astuto el miedo.

Charlie Hélice

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Hay mentes muy grandes en cráneos muy pequeños.
Solo hay que romperse la cabeza.

Charlie Hélice

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Dos tequilas, la noche, una hoguera, una guitarra, tu espalda.
El sonido de las olas, los acordes de la playa.
La arena mojada.
La vida que pasa y a veces se para.

Charlie Hélice

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Hay personas que llegan,
desordenan tu vida y hacen del caos el mejor lugar del mundo.

Charlie Hélice

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Te espero aquí sentado,
en aeropuertos sin vuelos directos,
en estaciones de trenes fantasmas,
te espero.

En las calles, en rascacielos,
entre semáforos que no se encienden,
en las montañas aunque sea otoño.
Y verano, y yo invierno.
Pero te espero.

Charlie Hélice

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Cuántas luces ha apagado la duda,
y cuántas dudas hay en tu espalda.
Cuántos besos al viento,
y qué pocos que te llegan,
que te calan.

Charlie Hélice